Poesia de GAL

Invito a los visitantes de mi blog que se acerquen a otro espacio de escritura en el que nos podremos encontrar.

http://poesiadegal.blogspot.com/

Para que escribo?

Poesía espontánea, escrita así de una, escuchando a Piazzolla, un poco triste un poco yo, la de siempre, la que no se puede ir...


Me siento en este espacio, vacio o vacia yo?
me siento en un suelo duro y conocido por mis huesos,
he caminado este camino tantas veces,
tantas y tantas noches sola
he visto mi espejo nublado, asolado por el miedo
He visto esa imagen turbia de mi
caer, como lluvia, contra la seca tierra
de esta yo, siempre aterrada
Siempre habrá alguien que recoja la otra imagen de mi
incluso yo, buscare sobre las astillas
la que siempre ríe, la que no se cae
y aún así entre la hierba,
por debajo de las máscaras,
por encima del amor, estará ella
la otra parte de mi, herida, escondida
mojando con lluvia de angustias perpetuas
el espejo en el que vivo.

un poco de historia

Tener este espacio me permite imaginar a los lectores del mismo. Me permito, además, pensar que quienes leen se preguntarán ¿por qué carajo dice reflexión lésbica si hasta ahora no hay nada de reflexión en todos los textos que están aquí?. Bien queridos y queridas lectoras la respuesta es muy sencilla: solo he puesto en este blog parte del material que me gusta y del que se ha alimentado mi alma (por decirlo de algún modo) para ser quien soy .
Reflexionando un poco a cerca de que significa ser lesbiana indefectiblemente advierto qué antes que nada "soy", "ser o no ser" como bien decía el viejo shakespeare.
O sea, no puedo saber si primero he sido lectora-escritora y luego lesbiana o si siempre he sido lesbiana y por eso me he dedicado a escribir.
La relación entre la escritura y ser lesbiana está, a mi humilde modo de entender, por demás relacionada. Aunque pueda parecer absurdo.
Durante mucho tiempo me dediqué a observarme y a pensar quien era, luego comencé a expresarme, de muy mala manera desde luego, los resultados eran por supuesto la falta de comunicación con los otros. Así fui armando una forma de expresarme para que los demás, medianamente, pudieran entenderme. Desde luego era dificil y desde luego muy pocos, por no decir ninguno, comprendía que quería decir.
Así que me dediqué a escribir . Al principio no me gustaba ni a mi lo que escribía, y por eso decidí que debía aprender más, luchando con mi monstruo interior llegué hasta un taller literario, que fue el camino hacia la liberación de mis palabras y mis sentimientos.
Los primeros textos revelaban mis escapes de la realidad pero poco a poco fui contactandome conmigo y comencé a decir lo que guardaba. De alguna manera comencé por comprender que la palabra y la acción se unían y que yo era cada vez más yo.
Ese yo era una mujer con deseos, con miedos y con muchas esperanzas.
Ese yo era quien crecía para decir lo que había callado durante tanto tiempo...